Es un momento educativo generador del resto de momentos, y favorecedor de situaciones de interrelación entre niños/as y maestros/as.
Es un espacio de crecimiento individual y colectivo, un espacio para compartir con los demás e irse descubriendo a sí mismo y a los otros.
También favorece que los niños expresen sus sentimientos e ideas, cuenten sus experiencias y, a su vez, se enriquecen con las aportaciones del resto de compañeros/as.
Es el marco idóneo para desarrollar diferentes capacidades y actitudes a través de los ejercicios y las actividades conversacionales que se dan dentro de ese contexto.
Desempeña un papel fundamental en Educación Infantil porque :
– ayuda a conseguir objetivos y contenidos.
– Ayuda a trabajar normas.
– Ayuda a averiguar los conocimientos previos de los alumnos/as y así saber de que nivel tenemos que partir.
– Ayuda a adquirir competencias básicas.
Además sirve para desarrollar los siguientes ámbitos:
– Lingüístico: les da la oportunidad de hablar y expresarse siguiendo una serie de normas (levantar mano, aprender a escuchar,respetar turno…) y se adquiere vocabulario.
– Social: se fomenta la socialización (compañerismo, amistad, solidaridad y respeto).
– Cognitivo: se fomenta el desarrollo del pensamiento del niño/a.
Cosas que se pueden trabajar en la asamblea:
– conocer y reconocer al resto de compañeros mediante fotos e identificar a los que ese día no hayan asistido al colegio.
– Nombrar al ayudante / responsable del día.
– Situar a los niños en el día que es para trabajar el espacio temporal.
– Hablar del tiempo meteorológico para diferenciar los cambios climáticos y hacer también referencia a las estaciones del año.
– Dialogar y compartir experiencias para mejorar el desarrollo del lenguaje oral.
– Poner en común y recordar las normas de convivencia en el aula y con el resto de compañeros, dando mucha importancia a los valores.
– Aprender y trabajar nuevos conceptos ayudándonos de Bits de inteligencia, objetos, canciones, videos…
– Reforzar los colores, letras, números y vocabulario del día a día.
– Contar cuentos, poesías, adivinanzas y cantar canciones.
– Explicar y motivar las actividades que se van a desarrollar a lo largo del día.
– Conversar sobre el centro de interés que estamos trabajando en la unidad didáctica o proyecto.
El papel de los padres en casa:
Las familias también pueden colaborar en la asimilación de los contenidos trabajados en la asamblea, como por ejemplo: reforzando lo que han aprendido los pequeños (siempre de manera lúdica), aportando nuevo material, el cuál nos sirve para seguir motivando a los niños y nos ayuda a captar mejor su atención, ya que lo novedoso siempre les gusta y además, el niño/a que trae algo al colegio se siente muy importante.
Para continuar con el objetivo de esta actividad, se puede señalizar un espacio en casa denominado “zona de asamblea” para que los niños/as puedan expresar sus sentimientos o emociones, tal y como hacemos en el colegio y dialogar en casa con los niños/as sobre las actividades que se han realizado fuera del ámbito escolar para que sean capaces de transmitir o expresar lo que han realizado fuera del aula.
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