Cuando éramos pequeños todos recordamos como en el colegio nos daban un aparato raro con bolitas de colores que estaban metidas por palos. Era el ábaco. En un principio no sabíamos cómo se utilizaría, pero nuestra maestra nos enseñó a utilizarlos y con ellos nos dábamos cuenta de que con aquel aparato tan simple podíamos realizar todo tipo de operaciones. ¡No nos lo podíamos creer, ¡qué aparato tan alucinante!
En la actualidad ha cambiado mucho, ahora para realizar operaciones tenemos calculadoras de todo tipo. Más grandes, más tecnológicas, con más funciones…
Con las calculadoras es mucho más rápido calcular, pero creo que con el ábaco era más divertido.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.