Pero ¿qué pasa ahora con el uso de la mascarilla?
En estos tiempos que vivimos la mascarilla se ha convertido en algo indispensable en nuestros días, y con ello, los mensajes que trasmitimos se ven afectos, pues no podemos ver los gestos ni pueden ver los nuestros al 100%.
Si es cierto, que la mirada es muy expresiva, de ahí que, “una mirada dice más que mil palabras”. Pero con el uso de la mascarilla estamos cubriendo la mitad del rostro. Para las personas y sobre todo para nuestros alumnos una sonrisa es un acercamiento hacia ellos, una forma de confianza, de motivación.
La mascarilla no solo afecta a nuestra comunicación verbal, también se ve afectada nuestra voz.
Por eso hago un llamamiento a todos para que nuestras expresiones se vean más reforzadas con los ojos y los movimientos corporales. Pues las personas somos de costumbres, y si nos acostumbrarnos podemos beneficiar la comunicación con cualquier persona.
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